MARIANO JOSÉ
DE LARRA
Tenía 27 años
cuando se suicidó
en su casa –en el número 3 de la calle Santa Clara, de Madrid– la noche del 13 de febrero de 1837, disparándose en la sien. Acababa de irse su amante, Dolores Armijo, después de comunicarle que volvía con su marido; posiblemente escu-chó el disparo. Larra está enterrado en el cementerio madrileño de San Isidro.
En un lugar de La Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. Quiso poner por suyo el nombre de su patria y llamarse Don Quijote de La Mancha.
En un lugar de La Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. Quiso poner por suyo el nombre de su patria y llamarse Don Quijote de La Mancha.